Los eurodiputados rechazan congelar sus salarios y dejar de viajar en primera
El presupuesto del próximo año del PE será de 1.725 millones de euros.
Salvo algunas enmiendas, el presupuesto ha sido aprobado con 479 votos a favor.
Las enmiendas rechazadas habían sido propuestas por un grupo de eurodiputados de la Izquierda Unitaria Europea y de los Verdes.
Sólo 3 eurodiputados españoles votaron a favor de volar en clase turista.
Estoy indignado con la propuesta de algunos de los parlamentarios de la Eurocámara de recortes presupuestarios en los emolumentos de los eurodiputados, y es que no hay derecho a que tan insignes Señorías se mezclen con la muchedumbre en las colas de facturación, a que se tengan que sentar junto a sudorosos - pero votantes - trabajadores y turistas, a renunciar a los ínfimos privilegios de poder recuperarse física y mentalmente de los estragos causados por arduas y extenuantes sesiones parlamentarias apoltronados en los relajantes asientos de la Business Class, mientras las azafatas les sirven reconfortantes refrigerios. Y que decir de la congelación de los salarios y dietas, pues efectivamente, de eso es mejor no hacer comentario pues ya queda todo dicho con su valiente postura defendiendo el sagrado sustento de sus familias. Sólo faltaba que después de sacrificarse y vivir en Bruselas renunciando, entre otros sacrificios, a la compañía de sus suegras, tuvieran que abrocharse los cinturones como trabajadores o funcionarios de baja estofa, vamos...hasta ahí podríamos llegar, pero si hasta se han puesto de acuerdo por aplastante mayoría de votos sin hacer excepciones por nacionalidades. No se preocupen sus Señorías, que ante la amenaza de sus derechos, les muestro mi mayor solidaridad, respeto y admiración ofreciéndoles mi fiel voto en las próximas elecciones...
Estoy indignado con la propuesta de algunos de los parlamentarios de la Eurocámara de recortes presupuestarios en los emolumentos de los eurodiputados, y es que no hay derecho a que tan insignes Señorías se mezclen con la muchedumbre en las colas de facturación, a que se tengan que sentar junto a sudorosos - pero votantes - trabajadores y turistas, a renunciar a los ínfimos privilegios de poder recuperarse física y mentalmente de los estragos causados por arduas y extenuantes sesiones parlamentarias apoltronados en los relajantes asientos de la Business Class, mientras las azafatas les sirven reconfortantes refrigerios. Y que decir de la congelación de los salarios y dietas, pues efectivamente, de eso es mejor no hacer comentario pues ya queda todo dicho con su valiente postura defendiendo el sagrado sustento de sus familias. Sólo faltaba que después de sacrificarse y vivir en Bruselas renunciando, entre otros sacrificios, a la compañía de sus suegras, tuvieran que abrocharse los cinturones como trabajadores o funcionarios de baja estofa, vamos...hasta ahí podríamos llegar, pero si hasta se han puesto de acuerdo por aplastante mayoría de votos sin hacer excepciones por nacionalidades. No se preocupen sus Señorías, que ante la amenaza de sus derechos, les muestro mi mayor solidaridad, respeto y admiración ofreciéndoles mi fiel voto en las próximas elecciones...
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