DE SUEÑOS Y ESTRUJADORES

Estrujenbank fue un colectivo cultura fundado en el Madrid de la movida por los pintores Juan Ugalde, Patricia Gadea y el poeta Dionisio Cañas.

Viene esto a colación, por la idoneidad, que, como posible nuevo nombre de la AEB (Asociación Española de Banca ), posee dicho colectivo madrileño.

Por qué si de estrujar se trata, eso sí, con el beneplácito de absolutamente todos los poderes del estado, nuestros, al parecer tan maltrechos bancos, más que estrujar, estrangulan de tal manera, que hasta en Bruselas - que no son precisamente caritativas ONGs -, sus formas han sido consideradas abusivas.

Días más tarde,¡qué casualidad!, ésta consideración ha originado que algunos bancos, políticos de ambos bandos y componentes de la judicatura, hayan alzado sus voces contra dicho abuso legal. Repentinamente ha de protegerse a los más desvalidos, frenar los desahucios más sangrantes, propagar como un reguero de pólvora el afán de justicia, proponer pactos, reformar leyes, no vaya a ser que......en la jornada de huelga del 14/N se nos vaya el control de las manos.

Llegó el fatídico día 14, glorioso según opinión de sindicatos y patronal, en el que tras las manifestaciones y aislados incidentes habituales, se clausuró la jornada para gozo y satisfacción de unos y otros. De unos y otros, a excepción de aquéllos trabajadores, autónomos y pequeños empresarios, que voluntaria o involuntariamente secundaron la huelga, y que inexorablemente van a sufrir recortes, uno más, en sus ingresos.

A la mañana siguiente, mermados los efectos euforizantes de la adrenalina reivindicativa, vueltas las aguas a su caudal, publicado cada periódico en portada su particular y sectaria versión de la película, vuelto a su cola los parados, a su balcón los desahuciados, una extraña duda flota en el ambiente.

La duda de porqué los sindicatos, una vez metidos en harina, si tanto desean cambios estructurales serios, no abogan por una huelga más dura que comprometa a la clase política y financiera. La duda de porqué las protestas van dirigidas exclusivamente en contra del gobierno actual, olvidándose de la nefasta gestión del anterior y adoptando una actitud propia de mantenidos. La duda sobre la opinión al respecto de los líderes obreros históricos, pioneros de la defensa de los derechos de los trabajadores. La duda acerca de la razón que les impide dirigir sus reivindicaciones contra la clase política en general, entusiasta fomentadora del actual capitalismo salvaje. La duda de porqué han de ir uniformados, identificados, haciendo propaganda del correspondiente sindicato, repitiendo hasta la afonía decimonónicos eslóganes y proclamas, organizados y manipulados como un ejército de clones. La duda de porqué no exigen la reforma de la financiación de los partidos políticos, la prohibición de las campañas electorales a fuerza de talonario, la reducción de los sueldos y prebendas que disfrutan los cargos electos, la transparencia en contratos con dinero público.

Tal vez cumpliendo algunas de estas premisas, las manifestaciones fueran apoyadas por mayor número de ciudadanos, o tal vez fuesen innecesarias.

Ayer tuve un sueño

Martín L.King